En una vida sin barreras
busco viajar mas ayá
de donde la
mirada no llega,
busco lo
que el corazón anhela,
eso que quiero,
lo que espero,
el pequeño pensamiento
timido que
se esconde
bajo la sombra del
horizonte,
el sueño jugutón
que viaja de la
luna a las estrellas
y de las estrellas
a ese deseo
imposible que
mi corazón cree posible,
una oportunidad
para
amar.

Una cronica de todos los días

Una crónica de todos los días

Diferente sería sacar con valentía lo que la duda te restriega en la cara,
Saber si la verdad es cierta o es solo una mentira necia,
Sentirse seguro por un momento y vomitar lo que en el mundo apesta,
Descontaminarse y ser diferente, ir con el tiempo y no dejar que éste se nos adelante, madurar juntos con cada experiencia vivida, con amores encontrados, amores perdidos risas y suspiros que van con uno y no dejar que se vuelen con un mínimo suspiro inquieto por escapar de su encierro.

Sería genial ver las cosas de una manera diferente sonreír delante y detrás de la gente , llorar de felicidad, dejando de lado la tristeza, ser siempre como niños inquietos, siempre corriendo buscando las hamacas , los toboganes, manteniendo la sensibilidad y pureza que todos hemos dejado olvidada en algún lugar del camino, en la escuela? El colegio? La universidad? O en el motivo que no queremos mencionar.

Es una vergüenza que nos inquieta o una mentira perdonada que sana el corazón, perdón que han recibido los que conocen a Dios, porque de seguro los que no lo conocen sienten tan fuerte ese dolor que se han acostumbrado, porque es como una droga seductora, un sedante que es su refugio, su lugar intimo, el sentimiento escondido, ese motivo que solo ellos y Dios conocen, es el vacío que no a podido ser llenado.

Es desesperante alejarse de Dios, es como alejarse del amor de mami, del cariño de aquellos seres amados los más cercanos, es entrar en una dimensión desconocida, donde nadie comparte en verdad, donde reina la maldad, lo peor del ser humano, la infidelidad, la hipocresía, la mentira,
Donde el que dice ser tu amigo, que incluso te trata de hermano en el momento más inesperado te apuñala por detrás y te deja tirado.

Basta con viajar en el autobús y ver como vidas vacías se mezclan contando sus crónicas en cada parpadeo de sus ojos, lanzan miradas desesperadas por la ventana tratando de encontrar afuera una respuesta que los haga sentir, sentir que vale mucho el motivo de estar aquí de saber si mañana esa estaca dejará d doler, estaca que bien puede ser un mal matrimonio, un marido violento y ebrio, una esposa que agrede a su esposo, pleitos entre hermanos y de pleitos padre e hijo, un embarazo inesperado, vicios fuera de control etc.

Cuan diferente sería ir al trabajo sin sentir esa pereza que nos agobia, y no es que sintamos pereza en realidad, si no que en la mayoría de los casos cada vez que vamos para el trabajo se nos bajan las pilas al saber a quien nos vamos a encontrar ahí, sabiendo que a partir de las 7 y 30 en punto empieza a bajar una gran nube espesa, llena de stress, no laboral si no ocasionado por actitudes y encontronazos con compañeros que son plagas termitas, pues carcomen poco a poco van carcomiendo las fuerzas del compañero, es energía que debería usarse para trabajar con efectividad, pero se gasta soportando a el compañero invisible que se convierte en una molestia continua para el compañero que se propone a trabajar con sinceridad .

En fin que hermoso es saber que tenemos un Dios todo poderoso, que todo lo puede, siempre esta ahí cuando ese amigo te da la espalda, cuando el agobiante trabajo parece desgastarte, siempre tiene un buen consejo, muchas promesas y palabras de aliento para no desfallecer en esos momentos, Él es quien dirige nuestros pasos, su voluntad se hace en todo momento desde que abrimos los ojos hasta el momento en que los volvemos a abrir y solo los volveremos a abrir si es su santa voluntad, hoy me siento feliz porque aunque se que me he caído Él me a levantado, si me he apartado, pero no a dejado de llamarme y aunque me sienta solo y triste tengo que saber que Él siempre a mi lado está, Él me lo prometió al decirme que aunque mi padre y mi madre me abandonaren con todo Jehová me recogerá. Yo lo creo y por eso sigo de pie.

Luis Fernando Conejo
8/5/10